Un fantasma indócil para gente odiosa: los fantasmas como dispositivo crítico de la economía afectiva del odio en Mariana Enriquez
Résumé
Dans cet article, je postule que l’histoire “Mes tristes morts” de Mariana Enriquez met en scène une guerre des subjectivités qui transforme certains corps en images de la haine. Mon hypothèse est que les fantômes n’apparaissent pas comme des personnages, mais comme des images-affect dont la performativité élabore une relation non causale entre la précarité économique et la précarité de la communauté, tout en montrant montre la manière dont la crise empêche la possibilité du deuil publique et la reconnaissance de la valeur de la vie. Pour le prouver ce faire, je montre construction d’un antagonisme social par la narratrice à partir du contraste entre sa morale et la rhétorique de la haine des ses voisins. Mon analyse est que la configuration de la voix narrative parodie les formules et les lieux communs qui simplifient la dynamique sociale qui sont présents tant dans la pensée progressiste intellectuelle que dans le langage de la haine de l'extrême droite. Je considère que, contrairement aux les commentaires de la narratrice et à ses tentatives d’exercer la justice conformément à ses valeurs morales, les fantômes apparaissent comme des dispositifs critiques plus efficaces pour démonter l'économie affective de la haine, car il est à travers de leurs gestes qu’ouvrent un espace d’hésitation entre la perception et l’action conférant aux affects une agentivité subjective.De cette manière, les fantômes montrent l’impact que l’économie affective a dans la construction de la communauté et le partage du droit à la vie au-delà des postures idéologiques.
Mots clés : fantôme ; affection ; performativité ; précarité économique ; communauté.
En este artículo propongo que el cuento “Mis muertos tristes” de Mariana Enriquez escenifica una guerra de subjetividades que transforma determinados cuerpos en imágenes del odio. Mi hipótesis es que los fantasmas no aparecen como personajes sino como imágenes-afecto cuya performatividad elabora una relación no causal entre la precariedad económica y la precariedad comunitaria, a la par que muestra el modo en el que la crisis bloquea la posibilidad del duelo público y el reconocimiento al valor de la vida. Para demostrarlo, muestro la configuración del antagonismo social que hace la narradora a partir de la contraposición entre su moral y la retórica del odio de los vecinos. Mi lectura es que la configuración de la voz narrativa parodia las fórmulas y lugares comunes que simplifican la dinámica social y están presentes tanto en el pensamiento progresista intelectual como en el lenguaje de odio de ultraderecha. Considero que en contraste con los comentarios de la narradora y su intento de distribución de la justicia conforme a su criterio moral, los fantasmas aparecen como dispositivos críticos más efectivos para desmontar la economía afectiva del odio, pues a través de su gestualidad suscitan una vacilación entre la percepción y la acción que abre la afectividad como agencia subjetiva. De este modo, los fantasmas muestran el impacto que la economía afectiva tiene en la construcción comunitaria y la distribución por el derecho a la vida más allá de las posturas ideológicas.
Palabras clave: fantasma; afecto; performatividad; precariedad económica; comunidad.